En Casas Bajas se celebran diversas festividades en honor a los Santos patrones, como por ejemplo "las hogueras de San Antón", patrón del pueblo, festividad que se celebra el 17 de Enero y en la cual el pueblo se sumerge en un sin fín de hogueras que invaden todas las calles del pueblo, con su correspondientes asados, vinos, pastas, para todos los visitantes. Además se amenizan las noches con bailes en la plaza del pueblo.
La fiesta de Santa Bárbara se celebraba el 4 de diciembre; como era época de pisar la uva para hacer el mosto, se recorría los cubos pidiendo vino, una parte de éste se vendía (para sufragar la fiesta) y con el resto se invitaba a los vecinos en la plaza. Posteriormente esta práctica desapareció y actualmente se venera a Santa Bárbara dentro de las fiestas de San Antón.
Tampoco podemos olvidarnos de "San Isidro Labrador" el día 15 de mayo, en la que se realizan degustaciones de "las gachas", gastronomía típica de la comarca. Además se invita a todos los niños del pueblo a juegos y actividades en la plaza del pueblo, mientras los adultos disfrutan de una gran merienda popular.
Para la época estival, se celabran las fiesta de "San Salvador" el día 6 de Agosto, en la que todo el pueblo se vuelca con las actividades que se organizan como, disfraces, concursos de gachas, turiatlon, jotas, meriandas populares, comidas populares, actividades para los mas pequeños, campeonatos deportivos, de guiñote, tirada de capazo, bailes con grandes orquestas y grandes bingos todas las noches. Para empezar la fiesta, la tradicional "rompida del botijo", que consiste en lanzar un botijo desde el campanario hasta la fuente de la plaza del pueblo, rompiendo el botijo y comenzando con el "reparto de vino" para todos los asistentes, lo que dará lugar a una semana interminable de fiestas.
Fiestas casi desaparecidas son la de los "mayos" que se celebran la última noche de abril; en la que se hace un sorteo con dos "bombos", en uno se encuentran todos los solteros del pueblo y en otro las solteras. Mozos y mozas se van emparejando durante toda la noche. Antes de las grandes corrientes migratorias, en pleno apogeo demográfico, el resultado del sorteo tenía continuación con un baile entre las parejas que por medio del azar o no (a veces se sobornaban a los "quintos" que eran los encargados de hacer el sorteo) se habían formado. Los mozos más agraciados, contentos con su suerte, ponían enramadas en la puerta de las casas de las mozas y los más osados les cantaban (muchas veces con más empeño que acierto).
"El Caminante" autor: Lucas Karrvaz | "El Caminante" a la entrada del Molino |







